martes, 26 de octubre de 2010

24

Pese a la distancia que hoy nos divide en dos, sigo pensándote cada segundo, y todos los días siguen llevando tu nombre. No quiero olvidarte, pero me duele recordarte tan ausente. Me haces mal aún no estando cerca. Sos un bisturí amenazando a mis venas. Y no me importaría que me cortes, pero sí que me sangres. No me duele que te hayas ido, sino que no hayas vuelto. No estoy sufriendo tu ausencia, solamente estoy llorando tu recuerdo.
¿Y qué más puedo hacer? Trato de no dormir, porque tengo miedo de olvidar cada uno de los detalles que componen tu cara.

No hay comentarios:

Publicar un comentario