miércoles, 24 de noviembre de 2010

Dejé de contar los días...
Estoy enloqueciendo.

martes, 23 de noviembre de 2010

Tiempo de recuerdos.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Si de algo me río hoy, es de lo que era ayer.
Si de algo puedo reírme mañana...
¿De qué será?

miércoles, 17 de noviembre de 2010

La gente cambia como lo hace todo. Yo quería envejecer, sólo quiero envejecer.
Deslízate junto a mi, sólo soy un ser humano. Voy a tener la culpa, pero es lo mismo, esta no soy yo. Ya ves, cree, soy mejor que esto.
No me dejes tan fría o enterrada bajo las piedras. Sólo quiero aguantar y saber que merezco tu amor. Lo suficiente. No creo que haya tal cosa.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Philip Morris

Hoy me toca fumarte.
Fumar tu recuerdo,
tu sonrisa,
tu voz,
tus palabras.
Ver como te desvaneces
entre humo y aire,
ver como desapareces
sin dejar cenizas.
Hoy me toca fumarte.
Y entre tanto te recuerdo,
te siento,
te huelo,
te hablo,
y dejo que avances un poco más,
cerca del corazón,
dentro de mis pulmones.
Vas a consumirme sin consumirte.
Vas a seguir haciéndome adicta a tu cuerpo,
que no es más que un vicio,
que no es más que algo que aparece y desaparece,
en apróximadamente tres minutos.
O quizás menos. O quizás más.
Voy a dejar que me consumas,
y que te instales.
Voy a fumarte, porque hoy me toca.
Y en mi caja de Philip Morris,
sólo queda un Lucky Strike.

"Perdona si te llamo amor"





Tú has llenado mi vida.
Yo sólo he sido un capítulo de la tuya.









sábado, 13 de noviembre de 2010

¿Cuántas veces sonreíste hoy?

martes, 9 de noviembre de 2010

- Lo que estás diciendo es que esta no era la vida que querías, ¿no?
- Eso no es lo que estoy diciendo. ¿Eso es lo que tú estás diciendo?
- ¿Y si esto es todo, Gerry? ¿Y si esta es nuestra vida?
- ¿Qué quieres decir?
- Que esto es todo. Somos una pareja con una compañía de limusinas... que puede o no tener hijos, fin de la historia.
- ¿Qué otra historia quieres?
- No sé. Yo...
- ¿Qué quieres, Hol? ¿Qué? Porque estoy cansado de tratar de entenderlo. ¿Quieres un apartamento más grande? Buscaré un segundo empleo. Quieres un hijo, no quieres un hijo. ¿Qué? Yo sé que quiero porque lo tengo en mis manos en este momento. ¿Y tu? ¿Sabes lo que quieres? Porque más vale que me digas ahora si no soy yo.
- ¿O qué? ¿Te vas a ir?
- ¿Quieres que me vaya?
- Si tú quieres, si. No me uses a mi como excusa.
- Me iré si tu quieres.
- Entonces vete si quieres.
- No me provoques.
- Si quieres irte, solo despídete.

lunes, 8 de noviembre de 2010

¿Quién demonios atrasó el reloj de mi muñeca?

sábado, 6 de noviembre de 2010

Bla, bla, bla.

Y entonces tu fantasma golpea a mi puerta..
Y me ve, sentada con un vaso en la mano,
un cigarrillo en la otra, unas ojeras disimuladas,
un corazón en descomposición,
y una toz de cobardía.
Me ve y me juzga.
Me hace ver las realidades que evito durante el día,
y me muestra los sueños que no quiero soñar por las noches.
Me da un abrazo soberbio de consuelo,
y me da la espalda creyendo ser sincero.
Me busca y dejo que me encuentre.
No quiero correr de tus suspiros ni murmullos,
no tengo miedo de conocerte de nuevo,
no me das miedo, ni me das temor.
Me das ganas de volver a conocer lo que
se suponía,
había en vos.
Sé que los fantasmas existen solo en nuestra mente,
no creo que seas un fantasma,
no creo en lo que no puedo ver,
pero sí en lo que puedo sentir.
Y te siento.
No sé cómo ni por qué,
tampoco desde cuándo,
pero te siento.
No recuerdo haber sentido alguna vez así.
Y entonces tu fantasma golpea a mi puerta..
Y comienzo a recordar.

jueves, 4 de noviembre de 2010








Tatuajes de recuerdos y piel muerta a prueba.
¿Vale la pena?
Valió la pena todo el tiempo.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Manicomio.

Una luz intensa, recobro la razón.
¿Qué es esta luz que me encandila?
Oh, ¿qué es este cuarto?
¿Qué es ésta luz en su interior?
Me levanto, recupero la visión.
Almohadillas de pared en una blanca habitación.
Grito entre rejillas: ¡HEY! ¿QUIÉN ANDA AHÍ?
¡Alguien que me ayude o me diga dónde estoy!
Tratando de pensar, comiendo a analizar.
Que mi voz rebotaría en alguien del lugar.
Grito entre rejillas: ¡HEY! ¿QUIÉN ANDA AHÍ?
Este es el momento en que oigo, solo desolación.
Me levanto, recupero la visión.
Almohadillas de pared en una blanca habitación.
Grito entre rejillas: ¡HEY! ¿QUIÉN ANDA AHÍ?
¡Alguien que me ayude o me diga dónde estoy!
Hello!
¿Hay alguien ahí?
Me asomo por la ventana que da afuera.
¿Qué es lo que veo? ¡La destrucción total!
Canibalismo, zombies por doquier.
Que me han mirado y que vienen por mi.
Miro por el pasillo.
Sangre en la pared.
Y los caníbales.
Ya han llegado aquí.
Se asoman por entre las rejas.
¡Ya no los quiero aquí!
Ya no se acerquen a mi.
YA NO SE ACERQUEN MÁS A MI.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Otro vaso y me voy, ja.

Me siento frente a una mesa en la cuál no hay nada más que una hoja en blanco, una pluma sin tinta, y un corazón sin color. Depende del punto de vista del cuál se vea, es bueno y malo, ¿no? De repente hay probabilidades, posibilidades (aunque ese de repente viene desde hace rato). Si lo vemos del lado del vaso medio vacío, únicamente veríamos que una hoja en blanco es triste, que una pluma sin tinta no sirve para nada, y que un corazón sin color es indicio de que está muerto. Pero viendo el vaso medio lleno, podríamos observar que una hoja en blanco significa poder escribir de nuevo, que una pluma sin tinta da la pauta de que hay que comprar otra, y un corazón sin color quiere decir que quiere que sea pintado nuevamente.
Las cosas no siempre son tan malas como parecen, y no pasa por ser optimista, es la verdad. Uno siempre se acostumbra a ver lo malo por una razón muy simple: es más fácil.
En pocas palabras, es más fácil decir "tengo un problema" que buscarle una solución. Nadie quiere buscar soluciones, por miedo a no encontrarlas.
¿Pero qué pasaría si encontrar soluciones, de un momento para otro, fuera más fácil que decir "tengo un problema"?